martes, 29 de enero de 2008

Rabia y destrucción


[...] se inflama en mi interior un fiero afán de sensaciones, de impresiones fuertes, una rabia de esta vida degradada, superficial, esterilizada y sujeta a normas, un deseo frenético de hacer polvo alguna cosa, por ejemplo, unos grandes almacenes o una catedral, o a mí mismo, de cometer temerarias idioteces, de arrancar la peluca a un par de ídolos generalmente respetados, de equipar a un par de muchachos rebeldes con el soñado billete para Hamburgo, de seducir a una jovencita o retorcer el pescuezo a varios representantes del orden social burgués.



3 comentarios:

Nur dijo...

Hormonas revueltas esta semana??

Salud!!

gonzalo dijo...

"Pero lo que más me hacía falta,
por lo que suspiraba tan desesperadamente,
no era saber y comprender,
sino vida, decisión, sacudimiento e impulso."
H.H.

Espero que tu Amanda pronto te ilumine...

Ánimo!
=)

Pilar dijo...

Je,je,,no llego a tanto! Aunque una travesurilla no estaría mal, de esas de las simpáticas.

Evidentemente las hormonas esta semana me val a mil. Será por un concierto de cuarzos..que me hizo despertar algo.auuuuuuuuuu

Gracias,,
A ver si aparece Amanda pronto!!