Se construye mediante una retención de la espontaneidad del movimiento.
Debido a una inhibición exterior:
Si queremos correr y nos dicen -NO-, el cerebro se pone en marcha para correr y esta acción se inhibe. Nuestros músculos detienen su movimiento de expresión, creando una tensión. A lo largo de los años de repeticíon, la tensión se convierte en una coraza, una armadura, una traba a la vida que quiere establecerse. El quiero correr de la vida se ve trabado por la inhibición exterior del -NO-.
Inhibición interior:
También la coraza física puede crearse también por una inhibición interior.
El -NO- ya está gravado en nuestro interior. Y cada vez que vamos a correr, es decir, la misma situación, ese -NO- interior nos retiene.
Este -NO- interior es incluso más poderoso que el no exterior, porque va siempre con nosotros.
Texto: Método Liberación de Corazas. Marie Lise Labonté